Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog
3 septiembre 2017 7 03 /09 /septiembre /2017 08:10

Subtitulado como "Filosofía práctica del instante", este ensayo fue finalista del Premio Anagrama de Ensayo en 2016. Escrito por el profesor mejicano Luciano Concheiro, se trata de un análisis lúcido y forzosamente pesimista a fuer de realista sobre la sociedad actual regida por la aceleración constante y la prisa. Lo curioso es que el autor sea una confirmación aparente de su libro ya que nació en 1992 (tiene 25 años) y es profesor universitario con dos carreras en su haber.

Lo cierto es que este ensayo trata de mostrarnos la confusión y los problemas que la gradual aceleración que las nuevas tecnologías han insuflado a todos los órdenes y niveles de nuestra cultura, desde el ámbito financiero al doméstico, desde la política a la vida cotidiana, las relaciones humanas y laborales e incluso los parámetros psicológicos de las personas. Sin revelar nada nuevo en esa dirección, quizá lo menos logrado sea precisamente el plato fuerte del libro, la propuesta de una "filosofía" de la percepción y el comportamiento basada en la consideración del "instante", su valoración como manera de provocar un enlentecimiento salvador en la dinámica irrefrenable de esa aceleración global. Inspirado en parámetros zen y taoístas e incluso en principios básicos del mindfulness  o atención plena, Concheiro no aporta nada especial y se queda voluntariamente corto en sus vagas propuestas de método.

Las tres áreas más interesantes del trabajo son el análisis de los efectos de la aceleración en un sistema capitalista obsesionado por la ganancia rápida e incesante, la política y sus modos de actuación afectados por el cortoplacismo (que influye incluso en el poder legislativo, creando una sobre producción de leyes de una vigencia corta que se vuelven obsoletas por su incapacidad de ajustarse al cambio constante y acelerado de la vida y la sociedad), y el efecto sobre los individuos sometidos a un estrés y una ansiedad crecientes. Y eso nos afecta tanto a las personas que ha terminado por causar un síndrome que se extiende como una epidemia al que la OMS ha llamado "encefalomielitis miálgica". Sus síntomas son: agotamiento reticente, fallos de memoria y concentración, insomnio, dolores musculares y articulares, jaqueca, dolores digestivos, náuseas y estreñimiento.

Concheiro desvaloriza el llamado Movimiento por la Lentitud,  que defiende la calma en el comer, en el hacer, en el vivir, fundado por Carl Honoré, que ha terminado siendo fagocitado por el sistema, ya que  “Se acaban volviendo otra mercancía del ciclo que critican”. Sin embargo su "solución" no acaba de salir del ámbito personal y se limita a él, pese a su llamamiento a "la espontaneidad, la intuición y la creatividad". Palabras hermosas que no puede oponerse a la marcha desbocada de la realidad acelerada. Esa búsqueda de "instantes" en los que reposar y ordenar las ideas es como las directrices de estoicos y epicúreos, de budistas zen o maestros taoístas y tiene el mismo efecto relativo que tuvieron, sin ir más lejos, con cerebros tan privilegiados como el de Wittgestein que pensaba, aunque finalmente no supo aplicarlo que para intentar controlar al tiempo, primero hay que recuperarlo. Y esa es una tarea individual y persistente contra viento y marea, que el turbo capitalismo arrasa en cuanto la detecta. La contemplación meditativa, esos "instantes" robados de la maquinaria permanente de internet, con su "efecto Google" que está acabando con nuestra capacidad de memoria, los móviles, la globalización digital, requiere una neutralización de la vida social, laboral y económica que paradójicamente no está en nuestras manos detener. Es una revolución silenciosa que para tener un efecto necesita de los instrumentos que son los causantes del mal, ¿Cómo se resuelve esta paradoja? ¿Es la huida, como dice Concheiro,  la actitud que hemos de oponer a la debacle? ¿Siguiendo la "resistencia tangencial" que propone: "una resistencia que no busca la transformación o el combate, sino todo lo contrario: la huida. Una resistencia que es una insurrección no pacífica ni pasiva, más bien de escape" ?

Como dice Concheiro, no podemos construir con esos elementos otro mundo, pero si diseñar una manera diferente de vivirlo. Lo malo es que no nos dice cómo implementarlo de una forma que supere la individualidad. Su método no rebasa ni mejora el que ya en el siglo IV ofreció Epicuro, el filósofo de Samos, entre los siglos IV y III antes de Cristo.

FICHA

CONTRA EL TIEMPO.-FILOSOFÍA PRÁCTICA DEL INSTANTE.-  Luciano Concheiro.- Ed. Anagrama. 172 págs.- ISBN 9788433964090

 

 

 

Compartir este post
Repost0

Comentarios

Présentation

  • : El blog de diariodemimochila.over-blog.es
  • : Ventana abierta al mundo de la cultura en general, de los libros en particular, mas un poco de filosofía, otra pizca de psicología y psicoanálisis, unas notas de cine o teatro y, para desengrasar, rutas senderistas y subidas montañeras.
  • Contacto

Recherche

Liens